Hace 4 años
martes, 27 de abril de 2010
LOS SANTOS INOCENTES DE MIGUEL DELIBES
Los santos inocentes es uno de los libros más leídos de Miguel Delibes, con excelente acogida entre todo tipo de públicos y una gran implantación enlas aulas de los institutos. Esta novela, que gozó de una excelente adaptación cinematográfica de Mario Camus, protagonizada por Paco Rabal y Alfredo Landa, cuenta una historia de injusticias, desigualdades sociales y opresión en un escenario rural.
3 comentarios:
Esta novela perdura en nuestro recuerdo. Vosotros sois más jóvenes, pero mi generación lloró con "milana bonita..." la corneja de nuestro protagonista Rogelio cuando el "mamón " del señorito se la mata. El respeto que Delibes tuvo a la naturaleza, la caza, el campo... se refleja en todas sus obras.
La España rural que nos presenta Delibes no fue ficción sino una triste realidad de nuestro país durante muchos años.
Uno de los temas tratados en la obra es el de la incultura y el analfabetismo, armas utilizadas por los señores de los latifundios para continuar manteniendo su "status". Afortunadamente, hoy disponemos del principal instrumento para que no existan tales diferencias sociales: la educación. Ya en la obra, Quirce y Nieves son conscientes de que sabiendo leer y escribir podrían abandonar aquel cortijo y los abusos del señorito y la duquesa, de ahí su empeño por hacerlo como un médico. ¡Qué importante es aprender para así romper tantas desigualdades sociales que sólo sirven para que unos pocos "saquen tajada" de otros más débiles!
La duquesa y el señorito son propietarios de latifundios trabajados por agricultores. Sorprendentemente, aún conservamos este sistema feudalista en nuestra España democrática. Pensemos en la Duquesa de Alba, propietaria de miles de hectáreas tan sólo en Andalucía por las que recibe ayudas económicas europeas de unos dos millones de euros. ¿Es, quizá, este uno de los motivos por los que Andalucía presenta un atraso en la economía? Algunos no deben pensar lo mismo y por ello le conceden premios tan distinguidos como el de Hija Predilecta de Andalucía, un insulto a todos esos pequeños agricultores que luchan día a día por sobrevivir trabajando sus pequeñas explotaciones.
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